Esta es una historia que ha durado 8 años; lo que empezó siendo una “adopción temporal” ;)) Acabó siendo una de las relaciones más largas que he tenido hasta ahora.
El nombre que traía “de serie” era Duna… y yo no se lo quise cambiar… me encantó, también el nombre. Desde el primer momento, se estableció entre nosotras una relación de cariño y complicidad, aunque mi cuñado Quique, que no entiende este tipo de relaciones humano-animales… siempre dice que “me lo tengo que hacer ver”
Mi amigo Oscar dice que estará en el Cielo de animales, y mi hermano David, que es una pena que se haya muerto ahora, “con lo que le había costado aprender alemán”.
Ella lo llenaba todo, siendo tan pequeña… y sigo teniendo la sensación de que sigue por aquí, que en cualquier momento me voy a tropezar con ella, que oigo sus comentarios… Porque sí, ella se comunicaba de muchas formas, también con el lenguaje de los gatos, y yo la entendía, y ella a mí también, en alemán y en español…
Aunque ya contaba con 14 años, lo cual en la edad de los gatos equivale a la nada despreciable suma de 75 años humanos, tenía cara de adolescente, y estuvo jugando hasta el último día, disfrutando de su vida y de cosas tan sencillas como sentarse a esperar su parte del yogur…
Son días para tomarnos ratos para sentir, para compartir… y luego seguir. Las emociones pasarán, pero para ello primero tienen que salir. Me está viniendo muy bien recordarlo estos días mientras preparo el taller del viernes, precisamente sobre cómo utilizar las emociones a nuestro favor. Para terminar me quedo con una preciosa frase de mi amiga Eva: … “Lo bueno es que tienes herramientas para que estos momentos tristes se cierren de tal forma que al final, cuando salga todo lo que tiene que salir y pienses en ella, te salga una sonrisa al recordarla”. Gracias a todos por vuestro cariño estos días.
Entiendo a tu cuñado Quique pero comprendo también tus sentimientos en estos momentos. Un beso, Julio
Gracias Julio, qué ilusión leerte. Un besazo
Jooo…. Lo siento mucho mucho, de verdad. Yo te entiendo perfectísimamente.
Un beso muyyyyy fuerte.
Tu primi
Gracias guapa… Lo sé…. Besitos
Pobre Duna…..Pero ha sido una gata muy feliz a tu lado
Un besito, Luisa
Gracias preciosa… Sí, hemos sido muy felices con ella y ella con nosotros… Un besazo y un abrazo especial para Merlín…
yo como Luisa, ambas han sido felices con esa experiencia y aunq nos cueste es la ley de la vida «Que descanse en paz»un beso un Kopf hoce
Gracias Gloria…
Pues yo no sé qué decirte.. Mis sentimientos hacia los animales han cambiado mucho con el tiempo. Antes solo me gustaban de lejos y los de los demás. Algo como los niños para otras personas. Hoy pienso diferente gracias a mi hermana y mi niño con sus perritos y, la verdad, me aportaron la comprensión que necesitaba para adorar a esos animalitos de compañía que tienen y los considero mis sobriperros. Es por ello que te entiendo perfectamente, tiempo atrás lo hubiera considerado de un modo muy… mejor obviarlo. Mucho ánimo, después de todo son como nosotros, son almas transeúntes en esta vida que dejan huella. Y, entre todo lo malo, te quedas con el placer de haber compartido con ella todos estos años y todos esos momentos maravillosos que habéis compartido. Besos
Y mira que no me sorprende esa evolución… si te estoy viendo… primero repudiando a los seres peludos y ahora enternecida al ver que también ellos tienen su corazoncito… : )) Un besazo Cielo y gracias…
Te entiendo perfectamente y comparto tu sentimiento. En mi familia los perros y gatos han sido siempre una parte mas, al ser sus vidas mas cortas el despedirnos de ellos es un aprendizaje extra que nos dejan junto con su afecto. Un besote Lola!
Gracias Mabel, desde luego… yo tambien creo que es todo un aprendizaje que te prepara para afrontar las variadas situaciones que nos presenta la vida… ¡Besitos!
Hola Lola.
Siento lo de tu gata, me imagino que se les debe coger mucho cario.
Un besote y espero nos veamos en julio.
Gracias Isa, espero que sí. Besitos