Esta semana reflexionaba sobre las situaciones que mantenemos aún cuando nos incomodan y nos roban pequeñas cantidades de energía.
En esta ocasión no voy a hablar de las “grandes situaciones”: una pareja que no nos hace feliz, un trabajo… una casa… En esta ocasión quiero hablar de esas pequeñas cosas en las que si no “nos paramos a mirar” es muy probable que pasen desapercibidas: un pequeño problema de salud, un hábito semanal que se ha vuelto aburrido, una relación con un conocid@ que nos resulta poco gratificante, unos zapatos incómodos…
Me refiero al tipo de cosas, aparentemente “insignificante”, que parecen no representar mucho en nuestra vida, pero que si vamos sumando… nos encontramos con que muchos “poquitos de energía” que se van por aquí y por allí, hacen una buena cantidad que necesitamos para propiciar esas otras situaciones que sí queremos disfrutar.
La revisión anual que comentaba la semana pasada, puede ser un momento propicio para hacer un poco de análisis, detectar alguna de esas situaciones, ver por qué las estás manteniendo y definir nuevos objetivos.
Reflexionando sobre algunas de estas situaciones que yo me he encontrado manteniendo, he detectado dos razones: por una parte un cierto miedo al vacío, del tipo… ¿Y si no hago esto… qué hago? La otra razón, coincide con una que me expresaba más de una clienta recientemente: “es que si lo dejo, voy a sentir que he fracasado”…. ¿Sí? ¿Dejar algo es fracasar? Qué tal si nos lo planteamos como una etapa que ha terminado y ahora estamos dejando espacio para la siguiente.
Merece la pena que te pares a generar alternativas, hay vida más allá de los hábitos que repetimos una y otra vez, simplemente porque no nos hemos parado a pensar en otras posibilidades.
Y con esta reflexión me despido por este año, desando que pases unos felices días y que construyas el 2013 que tú quieras para ti y para los tuyos. Con mucho cariño desde Múnich, Lola.
Muchas gracias por tu blog. Feliz año 2013 para tí y tu familia.
besos
Gracias a tí Sergio, se las daré de tu parte. Felicita también a toda la familia… Besitos
Como diría Serrat… ¡son aquellas pequeñas cosas… !
Que pases unos buenos dias con Jürgen y su familia. Hasta pronto. Tati
Gracias, sí pequeñas grandes cosas que pueden marcar la diferencia… Besitos también para vosotros, Lola