¿Dejarlo todo por ser madre?

 

Hoy quiero escribir sobre un tema que me estoy encontrando con sorprendente frecuencia entre mujeres que estoy conociendo, tanto en España, como fuera de nuestro país.

Y digo sorprendente porque aunque sé que a nuestra sociedad todavía le queda por recorrer un largo camino en materia de igualdad, creía que después de tanto tiempo con el tema sobre la mesa, habríamos progresado algo más.

Constato con inquietud que no, que aún son mayoría las mujeres (en ocasiones MUY JÓVENES) que asumen la mayor parte de la responsabilidad sobre los hijos que deciden tener… ¿Y los padres? ¿Ellos no se plantean cambios en su vida? ¿No son acaso los hijos igualmente suyos?

Por qué tantas mujeres siguen asumiendo sin discusión que «los niños son para las madres». ¿Por qué son las mujeres las que suelen reducir o eliminar la jornada laboral remunerada? ¿Por qué suelen ser ellas las que se ocupan cuando los niños se ponen malos? ¿Por qué siguen siendo mayoritariamente ellas las que se ocupan de la casa, la comida, la limpieza  o la logística familiar? ¿Es que ellos no viven allí también?

¿Por qué él cuando llega a casa, suele disponer de un rato para desconectar de la jornada laboral y la mujer no? ¿Es que no es importante también para ella desconectar?

¿Por qué la mayoría de mis clientes particulares son mujeres? ¿Por qué hay unos índices tan elevados de problemas de estrés, ansiedad y depresión, entre las mujeres?

¿Por qué tantas mujeres se enfrentan con terror al vértigo de volver al trabajo después de estar ocupándose, con dedicación exclusiva, de la familia? ¿No será que anticipan que no van a poder con todo?

En mi opinión, renunciar a todo por ser madre es un error. No es natural… las madres no nacen siendo madres, nacen siendo personas que después un buen día, en el mejor de los casos deciden de forma responsable y conjunta con su pareja, tener hijos. Pero la vida sigue… y una sigue siendo persona, pareja, amiga, hija, profesional… Prever que durante una etapa, ambos padres van a disponer lógicamente de menos tiempo para esos otros roles, es una cosa muy razonable, renunciar unilateralmente a todos ellos, no lo es.

¿Cuál es el legado que quieres dejar como persona? Además de ser madre… ¿A qué te gustaría dedicar (parte de) tu vida? ¿Qué te gustaría que tus propios hijos viesen en ti cuando te miren dentro de 10  ó 20 años? Una mujer frustrada por haber visto cómo se le iban escapando los días entre las manos, mientras todos los demás hacían «su vida», o una mujer que conjuntamente con su padre ha vivido su rol de madre, con los sacrificios y gratificaciones que conlleva, sin renunciar a TODO LO DEMÁS.

Si tienes dificultades con este tema, el coaching también te puede ayudar aquí, aportándote herramientas para gestionar esta situación de la mejor forma posible.

 

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Publicado por Lola Hernández

Psicóloga y coach afincada en Múnich (Alemania). www.coachingenmunich.com. Más info en este enlace: https://coachingenmunich.com/about/

37 comentarios sobre “¿Dejarlo todo por ser madre?

  1. Lo has bordado. Yo misma soy madre, tenemos un hijo de 3 años. Y digo tenemos porque no es solo mío. Con 11 meses entró en la guardería y le va fenomenal. Nunca he tenido remordimientos porque esté ahí. Mi opinión es como la tuya: tenemos una vida anterior y tenemos que seguir manteniéndola. Y padres, suegros, tíos, canguros, las guarderías: todos ellos pueden cuidar de los niños tanto como la madre.

    La misma palabra «madre trabajadora» lo dice todo. Yo no soy madre trabajadora. Soy una persona adulta, que trabaja, que empezó a trabajar después de estudiar, que luego fue madre junto con su pareja, que fue padre, y luego ha seguido trabajando como antes. Lo mismo que les pasa a los hombres. ¿No os habéis preguntado por qué nunca se habla de los «padres trabajadores»? Pues porque los hombres nunca se definen por su paternidad.

    Pero es verdad que nosotros seguimos el modelo típico actual: padre a jornada completa, madre a jornada parcial. La mayoría de las madres que conozco han tenido que reducir su jornada como yo. Pero no porque quieran, sino por los horarios de las guarderías, que dan por supuesto que uno de los dos va a trabajar menos. Y el peso de la tradición hace que se espere que quien reduzca sea la mujer. La tradición y los sueldos también, que por ser mujeres todavía ganamos menos que ellos.

    En definitiva: de nosotras se espera demasiado, y muchas de ellas todavía no son conscientes de ellas. El primer paso es liberarse de la mala conciencia. Este sentimiento es un claro chantaje emocional que se usa en contra nuestra. Y que un niño está en mejores manos con una madre frustada, o aunque no esté frustada, sin tener contacto con otros niños y con otros adultos, no lo he entendido nunca ni lo entenderé.

    Otra cosa (y termino): se habla mucho de la Mutter-Kind-Bindung y estas mitologías. Si la madre es la primera persona de referencia del bebé y luego niño, esto no es porque sea madre, es decir mujer con sus ovarios y demás, sino simplemente porque es la persona adulta que pasa más tiempo con él/ella. Y este hecho es una construcción social, una imposición a las mujeres, no es biología.

  2. Hola Lola, gracias por la reflexión sobre este tema.
    Estoy totalmente de acuerdo contigo: todo se decide entre dos, todo se lleva a cabo entre dos, fácil, sea la dirección la que sea.
    Me gustaría agregar un par de puntos/prespectivas que me han venido a la mente al leerte.
    El primero: tengo que decir, que yo conozco a gente que ella es la que decide, que quiere asumir el role de ser madre y dedicarse a ello al 100%, y ésto es aceptado por los dos y estupendo, porque es un acuerdo mutuo.
    El segundo: el problema que yo siento y veo en gente de mi alrededor, es que hay también muchas madres que no ven capaces a sus parejas de tomar tan gran responsabilidad, o mejor dicho, creen saber hacer todo mejor que ellos. Ésto las lleva a optar por el dominio absoluto y no delegan ninguna actividad (ellas son las mejores en esa materia). Esa actitud es la que les lleva indiscutiblemente a ser las encargadas de todo.
    Nadie nace como bien dices tú siendo madre, la que más y la que menos, sus malos tragos ha pasado con el primer hijo. Por qué no son capaces pues de dejar a ellos también pasar/superar ese trago, tomar esa responsabilidad?
    Y me atrevería incluso a decir más. En mi opinión, hay muchas mujeres que hacen o convierten en inútiles a los hombres y éstos, según les convenga se dejan hacer inútiles o no, todo sea dicho.
    Pero es inaceptable bajo mi punto de vista, que este tipo de madre/mujer a la que hago alusión, luego todavía se queje. Sí, lo hace todo, claro, pero por decisión propia, así que no caben quejas.
    No podemos esperar que nadie hago algo igual que uno mismo: imposible. Y ni lo uno estará mejor o peor que lo otro, simplemente diferente, esto hay que aceptarlo. Porque la igualdad hay que conseguirla por supuesto en materia de responsabilidad pero también de confianza.
    Un saludo!

    1. ¡Qué bueno Carmen! No puedo estar más de acuerdo. Si la decisión es consciente y compartida, debe ser coherente y satisfactoria para ambos. El papel del hombre a veces es cómodo, pero es cierto que todos nos podemos acomodar fácilmente si nos excluyen de cosas que de entrada, suponen un esfuerzo; creo que en el caso que planteas cada uno debe tomar conciencia y cuestionarse si quiere asumir su parte de responsabiliad: el que decide cargar con todo (porque nadie lo hace mejor que uno mismo) y el que se deja apartar por ser considerado poco hábil… Gracias Carmen

  3. Pues yo no estoy de acuerdo. En algunas cosas sí, pero en otras… Soy una de esas madres que se dedican en cuerpo y alma a sus retoños, gracias al horario que tengo por mi trabajo (hasta las 15 horas). En mi familia los dos nos ocupamos por igual, o casi, y si no es uno es el otro el que está con mi hija y sus numerosas responsabilidades de sus 8 años o realizando labores tales como la limpieza, compra diaria, etc. Aparte, nos ponemos de acuerdo para nuestras salidas/aficiones particulares.
    No me siento frustrada para nada, es más, me siento por completo satisfecha de mi vida y disfruto cada día, sobre todo cuando estoy con mi hija (aunque sea estudiando mates o haciendo manualidades para el colegio) y atesoro en mi memoria y en mi corazón cada momento. No sé quien dijo: «todo el mundo trata de realizar algo grande, sin darse cuenta de que la vida se compone de cosas pequeñas.» Y resulta que esas cosas son las que a mi me hacen feliz.
    Muchos besos Lola.

    1. Cristina, leyéndote veo que tú no estás en los casos a los que yo me refería en el post de hoy: vosotros os ocupais por igual, como tú bien dices, y ese es el objetivo que yo planteo. Si además, como dices, disfrutas al 100% cada rato que te regala la vida al lado de tu hija, miel sobre hojuelas; yo estoy hablando de gente que no se ocupa por igual y que no ha elegido conscientemente el rol que asume. Enhorabuena y ¡gracias por tu punto de vista!

  4. Hola Lola!
    Buen tema que da para pensar y que lo resumo en que el asunto del poder en una pareja pasa por estas cosas.
    Un espacio familiar se convierte a veces en una competencia de capacidades y ademas, por si fuera poco, heredamos la carga de que hay roles establecidos.
    Se necesita cierta seguridad en uno mismo y algo de crecimiento para asumir que el poder compartido es el equilibrio insustituible para una relacion sana.
    No siempre se puede, eso trae descontentos y desconformidades que a lo largo pesan en los integrantes de una familia.
    Los demas enfoques estan muy bien expresados por Montserrat y Carmen.
    Un beso querida Lola.

    1. Yo también creo que las luchas de poder no aportan, ni en la pareja ni en nada; lo que de verdad sirve es cooperar y claro, compartir, y creo que esto se hace de buena gana cuando uno está en igualdad de condiciones, y no me refiero a ganar el mismo sueldo (es un tema que daría para mucho) pero sí creo que tener una digna independencia económica por ambas partes, ayuda a que se perciba como real esa igualdad de condiciones. Y a día de hoy, el trabajo doméstico no está remunerado… Muchas gracias Mabel por tu como siempre, valioso punto de vista, y especialmente ahora… ¡¡Un besazo y cuidate muchísimo!!

  5. Querida Lola,
    Yo soy padre, y lo he dejado todo, mejor dicho, me han obligado a dejarlo, porque para mi, mi hija lo es todo. por decisión judicial tan solo puedo ver a mi hija un par de dias al més, solo puedo contar con ella en vacaciones de navidad y verano(pero no con un reparto equitatívo), y eso que en Munich concrétamente hay mas de dos periodos vacacionales, creo poder contar hasta 6. Y puedo añadir:¿aceptariais vosotras/os esta esta imposición, en honor al tan magnifico y tan socorrido «interés superior del menor» ?

    Esto es en castigo, obviamente, por ser padre, por tener pirula, por tener los patucos azules.

    Tengo a mi hija a miles de kms, y no es que yo me haya fugado, es que se la han llevado, yo no he pinchado y ni cortado en ese traslado, pero lo tengo que aceptar por imposición, al igual que todo lo demás, me tengo que conformar con disfrutar de las migajas, si se me permite la expresión. Si la tuviera a mi lado, tendría que salir de mi casa(y costearme otra), si, la que tanto esfuerzo me ha costado y me está costando y me seguiría costando, para dejar la vivienda a mi hija, pero también a su madre, sin ningún tipo de coste para ella, pero aun así, tendría limitado el tiempo que disfruto con ella. Porque yo supongo, que las madres, sentiran algo parecido a lo que siento yo, a lo que sienten lo padres, que es un placer incuantificable, al ocuparnos de nuestros hijos, y no creo que exista la maquina de medir cariños, de medir placeres, de medir quereres, para poder comparar.

    Ni que decir tengo, que me ocupado de mi hija, que la he llevado al médico, porque he estado con ella cuando estaba mala, le he dado de comer, me la he llevado a mi trabajo, la he sacado al parque, le he limpiado el culo, he reido con ella, le he transmitido normas de conducta, la he mimado, la he reñido, la he querido. la he dormido, etc… Pero tengo que decirlo, ¿porque tengo que decirlo?, acaso no se sabe ya lo que hace un padre.

    Aun con todo eso, creo que para evitar la retaila de males que anunciais en la lineas anteriores, que estoicamente soportan las mujeres, se debería aumentar la condena a los hombres. Pues, el delincuente lo es menos cuando el castigo que deberá soportar es mayor, y este le hace recapacitar y disminuir sus actos delictivos. Hartos estamos de presenciar en los medios, como debería incrementarse las penas para este u otro delito con el fin de reducir los males que asolan a esta sociedad.

    Muchas gracias por vuestro tiempo.

    PD. Por suerte, este tipo de males, tan solo lo sufrimos unos cuantos hombres, al igual que también hay unas cuantas madres que sufren de otros males. En la mayoria de las parejas, se acepta, se reparte y distrubuyen los roles, de mutuo acuerdo, bien por tradición, necesidad o por rentabilizar los ingresos economicos de la pareja en conjunto. No tengo nada en contra de las mujeres,es más, me gustan la mujeres, como a ellas puedan gustarle los hombres.

    1. Javier, conozco y siento por lo que estás pasando, debe ser muy duro estar tan lejos de tu hija y verla tan poco, sobre todo para padres como tú… Tú te has implicado y te sigues implicando todo lo que puedes con tu hija, en su educación, en su cariño, en todos los sentidos. Yo no me refería a padres como tú en el post de esta semana. Espero que sigais dando los pasos necesarios para conseguir mejorar la situación que teneis en este momento, te felicito por esa implicación y espero que sigas disfrutando tanto de ella y ójala que cada vez más. Un abrazo fuerte.

    2. Hola Javier, con el permiso de Lola me apetece mucho responderrte.

      Creo que tienes mucha razón en mucho de lo que dices, mi experiencia me cuenta que no en todo. Tengo que decirte que en la mayoría de las parejas no se acepta, se reparte y se distribuyen los roles de mutuo acuerdo. Eso, hoy por hoy es la excepción a la regla, tradicionalmente y hoy también son las mujeres las que se ocupan en mayor medida de los hijos. Es por esto que la ley es como es.

      Sin embargo creo que la ley está obviando una realidad muy importante y espero que cada vez más extendida que la componen los hombres como tú. Hombres que se interesan por sus hijos, que son realmente padres y quieren serlo se encuentran con esa tremenda injusticia de una ley que no les tiene en cuenta.
      Te deseo suerte y que no ceses en tus reivindicaciones. Porque las leyes suelen ir por detrás de la realidad social, y sólo con mucho empuje y lucha se combaten las injusticias.

      Enhorabuena por ser un padre como el que eres, ya me gustaría a mi haber tenido un padre como tú. Un saludo.

  6. Un asunto interesante sin duda. Muy común y con muchos aspectos a considerar.
    En mi opinión, lo mas curioso es la pregunta de ¿por qué se adopta esa actitud?
    Mas allá de la educastración y de los roles aprendidos ¿Que es lo que impide cambiar de forma de actuar? ¿Cual es el beneficio que se optiene de esto?… ¿Eludir confrontamientos? ¿Eludir asumir errores en otros campos? ¿Tener un respaldo para sentir que si algo va mal no es por nosotras? ¿sentirse responsable, imprescindible o autovalorada? ¿Acaso tener un motivo de queja admisible para no enfrentar otra queja subyacente?
    Sin duda un tema complejo, controvertido y muy interesante en el camino de «conocerse, aceptarse y superarse».
    Muchas gracias por tu entrada, me ha encantado lo sugerente que me ha resultado.
    Un abrazo!

    1. Me alegra mucho tu aportación y tu siempre interesante punto de vista compañero. Coincido contigo en que en este post hay muchas preguntas que responderse y las tuyas son poderosas Polo. ¡Gracias a todos por enriquecer la entrada con vuestra visión!

  7. Lola q razón tienes. Yo me desagañito intentando convencer a las mujeres jóvenes y no tan jóvenes de q mientras q sigan asumiendo el tema de la conciliación como » a ver como cuadro niños, csa y trabajo» sin contar con el hombre para nada, o como mucho una pequeña «ayuda», la discriminación no dejará de existir. Para muestra un botón, esta frse se la he oído a muchísimas mujeres:
    -Es que si me pongo a sumar los gastos de guardería, extraescolares o canguros, para lo que me queda por trabajr, no merece la pena, me quedo en casa. Y digo yo¿pq co….ño se imuputan estos gastos al salario de la mujer????? Acaso se imputan solo al salario del hombre la hipoteca o la luz? Si el niño es de los dos ¿no sería lo normal q fuse un gasto a medias, com lo son todos los demás de la vida en común??? Yo es q lo flipo.
    Lo peor de todo, es q ahora, con la crisis, está empezando a cundir la idea de q las mujeres deben volver a casa, q estábamos mejora antes, q nos la han metido doblada con q las mujeres trabajen…y lo peor de todo es q casi se lo oigo mas a las mujeres q a los hombres

    1. Susi, he sonreído mucho mientras leía tu comentario, porque verdaderamente lo reflejas muy bien. Me alegro de que estés vacunada frente a esta visión desde mi punto de vista tan desequilibrada y tan distorsionada de lo que es un proyecto, en la mayoría de los casos, de pareja, y se concibe, con cierta frecuencia, como una responsabilidad únicamente personal… Te envío un abrazo y te doy las gracias por tu comentario.

  8. Hola! me dieron el link a este blog y me he quedado pegada leyendo los diferentes post. estan todos super interesantes!

    Sobre este tema en particular me nacio la necesidad de comentar. No soy madre ni tengo pareja, pero el tema de la igualdad de roles me lo he planteado a mi misma varias veces.

    He llegado a la conclusion de que, lamentablemente aunque quisieramos que fuera diferente, nuestro cerebro, pensamientos y cultura evoluciona mucho, mucho mas rapido que nuestra biologia. Por ejemplo, las mujeres vivimos más, acumulamos más grasa, podemos estar atentas a más cosas a la vez, tenemos más vision periferica, en general no somos buenas para los mapas, etc etc etc porque nuestros cuerpos y cerebros evolucionaron para estar a cargo de los niños mientras el hombre cazaba, para lo que necesitaba tener mas musculos, vision mas fina, etc. Todo con el fin de preservar la especie y poder cuidar a las crias en un invierno, aunque hubiera poca comida, etc etc.

    En resumen:
    Nuestros cuerpos y cerebros siguen estando más adaptados al estilo de vida de la epoca de las cavernas que al que llevamos hoy en dia.

    Las mujeres tendemos a ceder mas y sacrificar mas, no solo por la educacion machista que quizá hemos recibido, sino que todavía tenemos como una programación genética a actuar de esa forma. Y podemos aguantar más sacrificios en esos aspectos que los hombres, que se suelen «ahogar» más rápido o andan más pendientes de la competencia en lo profesional, etc.

    Por ende, y aunque la educación hace mucho por cambiar las cosas, la igualdad de géneros a la que aspiramos hoy y que planteas muy bien en este post en el tema de los hijos, será muy difícil de conseguir porque pasa por una lucha de pensamientos y educacion contra hormonas y biología. No imposible, pero no es una pelea fácil.

    No soy profesional del área evolutiva ni mucho menos, pero lo que expongo es mi conclusion de leer y pensar al respecto y puedo tambien estarme equivocando.

    Un saludo!

    1. Hola Nena, me alegra que te guste el blog y gracias por contribuir con un comentario tan interesante. Comparto contigo que la evolución biológica va más despacio que la social, de hecho es así en aspectos tan curiosos como las emociones, por ejemplo, aspecto en el que seguimos reaccionando de una forma «animal» más que racional. Yo creo que las mujeres están programadas genéticamente para el cuidado de los hijos, y para más cosas… Creo que el cuidado de los hijos (como seres dependientes) afortunadamente no dura toda la vida, sin embargo, veo la tendencia de muchas mujeres a hacer de sus hijos «su vida», y sigo pensando que eso empobrece su vida. Si nuestra predisposición genética fuese tan determinante, las mujeres no sentiríamos la necesidad de hacer nada más, y sin embargo (afortunadamente desde mi punto de vista) la sentimos. Creo que la maternidad no debe ser algo que nos defina, sino un (maravilloso) aspecto más, las mujeres primitivas, además de los hijos, se ocupaban de la agricultura, de la organización y de muchas cosas más… Gracias por tu interesante reflexión y no dejes de contribuir con tu punto de vista. Un abrazo desde Múnich!

  9. Gracias a todas por sus aportes. A mi me pasa algo parecido pero un poco diferente a la vez. Soy profesional, capitan de buques mercantes. Tengo casa, un pasar economico muy bueno. El problema es que soy madre soltera desde hace dos años y medio (la edad de mi hija). Naturalmente he dejado de navegar al rededor del mundo para enfocarme en navegar en mi país para no estar tantos días lejos de mi niña. Y si, digo días porque mi trabajo embarcada requiere días de navegación. A todo esto, he dejado a mi hija hasta quince días, con mi madre por supuesto. Y aqui entro en la controversia. Me encanta mi carrera, me encanta navegar, me encanta irme por días y llevar una vida distinta de las demás personas. Me encanta haber llegado a ser la primera capitán en mi país, la primer mujer en haber estudiado esto en un mundo de hombres.
    Despues de la llegada de mi hija, me ha costado todo más. He renunciado a algunas cosas pero trato de no a todas. Cuando me voy a navegar, soy literalmente feliz, pero a su vez me siento mal de dejar a mi hija, me siento mala madre. Pero he probado dejar de navegar tambien, y me empiezo a enfermar emocionalemte porque no soy feliz. Por supuesto que tambien puedo ser feliz al lado de mi niña pero siento que es injusto renunciar a quien soy. Capaz que esto me convierte en mala madre, pero no puedo evitar sentirme asi.
    Por otro lado tengo la gran influencia de mi madre, que como quiere ver lo mejor para mi, ella quiere que yo trabaje en una oficina y asi estar cerca de mi niña, lo que evidentemente para ella es lo mejor (mi niña). Pero encerrarme en una oficina y dejar de ser capitan de barcos es una vida que realmente no esperaba. No estudié tantos años de mi vida y no me habrí mi lugar en un mundo de hombres para renunciar a todo y estar en una oficina. Esta mal que piense así? A su vez, si decido quedarme en casa a ser madre y cuidar a mi hija, que gracias a dios economicamente lo puedo hacer. Ajustada pero puedo. Trabajo en el jardín con plantas, estudio piano, etc, etc., tambien tengo la opinion de mi madre que estoy mal dejando de trabajar y no teniendo marido, etc, etc. Lo del marido, compañero, novio, etc, lo voy a dejar de lado ya que es todo un tema aparte. En mi opinion y quizas me la he generado como un sistema de defensa para no sentirme tan sola, como me siento a veces, tener una pareja, en algun momento me va a llegar. No salgo a buscar ni tampoco tengo apuro. Con mi hija chiquita me dan muchos miedos en cuanto a parejas ademas de que no estoy interesada aun en sacarle tiempo a mi niña para dedicarlo a un hombre aun. Ya vendrá. No siento que sea mi prioridad en este momento. Por otro lado, a veces tengo algo por ahi que me hace recordar lo sola que estoy…. jajaja. Pero lo que mas me procupa es el tema laboral y familiar en lo cual no logro encontrar una armonía. Necesito una opinion please.
    Gracias

    Marina

    1. Hola Marina, gracias por tu interesantísima aportación. Leyendo tu post se me ocurre… ¿qué tal acondicionar algun espacio en el barco para que tu hija te pueda acompañar? Es cierto que en la vida, a veces no podemos tener todo lo que quisieramos al mismo tiempo, eso supone, elegir… Piensa en el futuro que quieres para tí y para tu hija y da pasos en esa dirección, a veces simplemente tenemos que hacer concesiones a corto plazo, para retomar más a largo plazo nuestros planes profesionales. Un saludo grande capitana!

  10. Estoy muy de acuerdo a todo lo que dicen pero en mi caso.. estoy conviviendo con mi pareja llevo 1 años y 8 meses y tengo 33 años el tiene 39 y con una hija, el caso es que el a estas alturas decidió no tener mas hijos, en nuestra relación todo fenomenal hasta que llego este momento yo en algún momento quiero ser madre y no puedo renunciar a eso por mucho que lo ame…… Creo que es un egoísmo de parte de el, lo quiero demasiado pero es una situcion que no puedo renunciar a ser madre…. no se si estaré equivocada pero para mi esta persona nunca me a querido me a traicionado utilizado etc…. así que tome la desicion de irme aunque el me detuvo pero así y todo no pienso renunciar nunca hacer madre por un hombre

  11. Tengo 32 años y una niña de 6 meses..mi vida a dado un giro brutal y me cuesta asimilarlo..cada vez me siento más colapsada aún teniendo ayuda de su padre y familia.estoy perdiendo el pelo de una forma brutal.echo de menos cosas simples..me siento cono atrapada..creo q necesito ayuda..gtacias

  12. Hola. Soy de Argentina, y me gustó mucho el post.
    Estoy cursando casi el 8vo mes de embarazo, con una beba de 1 año y medio ya. Yo he dejado mi trabajo, en el que me iba bien, y he decido cambiar de carrera este año, porque cuando lo decidi quedé embarazada y luego no me animé. Ahora estoy por comenzar a estudiar la nueva carrera y me es muy dificil decidir si comenzar en Marzo, que es cuando necerá mi próximo hijo, o en Agosto, para que sea un poco más grande. Pero la verdad que quiero comenzar ya con la carrera, por momento siento que me frustro, que al final no sé ni cuándo volveré a trabajar, más allá que haber dejado de trabajar fue de mutuo acuerdo con mi marido, y él se ocupa mucho de nosotros, siento que no solo quiero ser mamá toda mi vida, es decir, quiero sentirme realizada profesionalmente en lo que me gusta, volver a trabajar, sentir que yo también tengo tiempo para mi. Porque estar todo le día en la casa con los chicos, la verdad es que no hace que tenga tiempo para mi, sino todo para ellos. Estoy muy confundida, no sé qué hacer. Por momentos quiero comenzar la facultad ya en Marzo, pero me siento culpable de dejar a mi bebe que recien nacerá, no sé qué hacer.

    1. Hola Jackie, gracias por compartir con nosotros tu inquietud. Entiendo que tengas dudas y al mismo tiempo, me parece que tú misma te estás respondiendo… ¿Qué te dicen tus emociones cuando piensas en dedicarte al 100% a tus hijos? ¿Y cuando piensas en compaginarlo y enriquecerlo cuidando otras facetas de tu vida? Y tu marido… ¿se siente él culpable por ir a trabajar? Disfruta de todas y cada una de las facetas de tu vida y enhorabuena por ese próximo alumbramiento. Saluditos desde Múnich

  13. hola Lola:
    me encanta tu comentario, en estos momento yo tengoun hijo de tres años y soy madre soltera. no cuento con mucha ayuda de parte de mi mama (ya que ella vive fuera) y practicamente estoy sola. Cuando mi hijo iba nacer su papa me dejo, despues de 10 años de relacion, simplemente se fue con otra mujer. eso me dejo debastada y acabo por completo con migo, aunado a eso perdi mi trabajo y entonces cai en una depresion terrble de la que siento que aun no he logrado salir. Me aleje de todas mis amistades, ya no salgo a hacer nada que sea para mi, pues siempre me quedo cuidando a mi hijo, y lo disfruto mucho , pero hay momentos que me siento aislada y me siento frustrada, no se de que manera puedo recuperar mi espacio. Antes de todo esto yo era una persona muy exitosa , me sentia capaz de todos los retos que se me pusieran, hoy en dia me siento temerosa y menosprecio mi capacidad.

    saludos

    1. Hola Kriz. Gracias por compartir tu historia, imagino que ha tenido que ser duro pasar por todo eso… pero, ¡sigues aquí! Y tienes un hijo maravilloso al que adoras. ¿Es posible que necesites ocuparte un poco de tí en esta nueva etapa de tu vida? ¿Te estás cuidando? ¿Qué cosas maravillosas haces por tu hijo? De esas… ¿cuáles podrías empezar a hacer por tí? ¿Qué cosas puedes hacer por tí cuando estás con tu hijo? ¿Y cuando no está? Te invito a ponerte manos a la obra, a no conformarte, si tú no puedes sola hay muy buenos profesionales que te pueden ayudar. ¡Hazlo por ti! (Y le sentará bien también a tu hijo…) Un saludo cariñoso desde Múnich.

  14. Creo que el unico motivo de que las madres tengan problemas de depresión, estrés y ansiedad es debido a artículos como este que le dicen que deja de ser casi «persona» por dedicarse a ser madre durante unos años… Los hijos como mínimo los 6 primeros meses por naturaleza deben permanecer con la madre quien les da el pecho. Puedes decirme que existe el sacaleches o biberones de formula, pero nada como su mama abrozandole mientras le da el calor de su pecho y respiración. Es naturaleza y amor. Luego de los 6 meses o mas, ya no depende de tu pecho pero si de tu cariño, cuidado y compañía… Eso no lo sustituye guardería ni nadie. Los hombres, por desgracia, suelen estar mejor remunerados que las mujeres, de modo que por prescindir de un sueldo, mejor el de la mujer. Pero que suerte tan grande nos ha tocado entonces!!! Poder ver cada día a tus hijos en todas las situaciones, ser tu quien les enseñe las primeras cosas… eso es un regalo. Es una etapa maravillosa de la vida y en la que no renuncio por ello a nada de mi misma. Solo mi parte laboral queda a un lado para hacer algo que quedara en mis hijos para siempre.

    1. Hola Eveydavid,

      gracias por compartir tu opinión. Lo recogido en el post se basa en mi experiencia profesional con clientas que se sienten así por olvidarse de cuidar de otras facetas importantes de su vida al volcarse en la de madre. Claro que la maternidad ha de ser una etapa maravillosa, y que conlleva renuncias, lógicamente. Lo que yo quería compartir es que esas renuncias no deberían ser siempre solo por parte de la madre y que las mujeres, cuando venimos al mundo, primero somos personas, y después, en algunos casos, madres. Gracias de nuevo Eveydavid.

  15. Hola a todas!. Lola, me parece muy interesante el tema que has sacado aquí. Yo he sido madre el 25 de Diciembre de 2013. Mi pareja y yo decidimos de mutuo acuerdo que yo me ocuparía de la crianza de nuestro hijo su primer año o dos primeros años de vida. Estoy en ello y me encanta poder disfrutar de mi peque todo el día, aunque también es agotador por todas las tareas que hay que hacer y responsabilidades a lo largo del día. Mi marido tiene un negocio propio y trabaja por las mañanas o por las tardes turnándose con otra persona…pero las tardes o mañanas que libra se dedica a estudiar (se está quitando la ESO)…así que yo me paso las 24 horas al cuidado de mi bebé, que es un niño muy activo, nervioso y, lógicamente, me demanda constantemente. Cuando di a luz, tuve una depresión postparto (recuperación de una cesárea, poca ayuda en casa, un tiempo de perros que me impedía salir con el bebé, y una crisis de identidad tremenda de la que me costó recuperarme). Ahora estoy totalmente recuperada, pero lo que peor llevo es la desconexión y el aislamiento porque el bebé me absorbe todo el tiempo (a penas me puedo ocupar de la casa) y mis amigas han «desaperecido» desde que nació mi hijo. Me siento bastante sola. Y aunque no me arrepiento de la decisión que tomé en su día, echo de menos mi vida de antes en muchos aspectos porque pasé de no parar en casa, trabajar casi 12 horas al día, socializarme constantemente…a cero. A estar únicamente con mi niño, no tener una conversación adulta en todo el día (a excepción de la noche que es cuando llega mi marido, y afortunadamente el niño duerme bien y eso es un alivio), y me siento bastante sola. Durante las clases de preparación al parto hice un grupo de amigas con las que whassapeo cada día, pero mi intención era que pudiésemos quedar y crear un grupo de apoyo y relación…pues creo que sería algo beneficioso tanto para nosotras como para nuestros bebés…pero desde que dimos a luz a penas hemos quedado un par de veces y no las veo con mucho entusiasmo por quedar (y eso que somos vecinas del mismo barrio), así que a veces me hundo y me siento culpable por sentirme mal. Quiero estar con mi hijo y cuidarlo yo, pero al mismo tiempo no tengo apoyos y no tengo tiempo ni de ir a tomarme sola un café…siento una pérdida de identidad total. Mi marido me quiere y me apoya en todo, pero a penas está en casa…él sigue con su vida, pero yo no. Yo siento muchas cosas: por un lado me siento feliz y no quiero otra cosa que estar con mi niño, y al mismo tiempo me siento atrapada.

    1. Hola Pili, en primer lugar, mucha gracias por compartir tu historia: estoy segura que, como a mi, hará reflexionar a otros compañeros de lectura. En segundo lugar, leyéndote, tengo la sensación de que tú has tenido un bebe, pero tu marido no… Desde mi punto de vista, una cosa es que hayáis pactado que durante el primer o primeros 2 años de vida del niño, tú vas a ocuparte de él, aparcando temporalmente tu vida profesional, y otra cosa es que tu vida se limite a cuidar de tu hijo, mientras la de tu marido no se ve alterada en absoluto. Una vez más, las emociones, esas sabias compañeras que nos avisan de cómo van las cosas, están haciendo muy bien su trabajo y te están diciendo que hagas algo diferente…

      ¿Qué tal si hablas con él? ¿Qué tal si le expresas que además de apoyo moral necesitas apoyo práctico? ¿Qué tiempo podrías reservar para tí cada semana? ¿Qué te gustaría hacer durante ese tiempo para recargar la energía que estás perdiendo? El niño necesita que te ocupes de él… pero no olvides ocuparte también de tí… ¿Quién lo hará si no? ¡Animo y poco a poco… a por ello!

  16. Hola mi nombre es Carla, soy mama después de 4 hijos el ultimo de 10 años y con 42 yo, fui mama un vez mas mi bb tiene 1 añito y 3 meses y es súper apegada a mi, quiero salir a trabajar, o tener un momento para mi y esto parece q a mi esposo le molestara, me ah tratado de egoísta, de querer ser libre y moverme sola y no entiende q lo q yo siento es una necesidad, q amo a mi hija, pero q me supera el estar las 24 hs del día solo ocupándome de ella, no tener otra cosa q hacer mas q eso, ya q ella es muy demandante mío y creo x momentos esa es una excusa perfecta para el decirme q me ocupe de ella, ni siquiera soy dueña de ir al baño sin la bb, a la vez me pide tendría q seguir trabajando ir al negocio ayudarlo, le digo q me encantaría xq seria una forma de hacer algo yo también, pero q deberíamos poner alguien q cuide de Almita en esas hs y el se molesta conmigo, tengo q hacerlo si, pero con la bb. realmente me siento frustrada, agotada, siento q deje todo x tener a Almita y q esta decisión parece q me obliga a dejar de ser mujer, q no tengo derechos mas q estar con ella, limpiar, cocinar, lavar, planchar, etc, etc, estamos peleados justamente xq mi reclamo es la necesidad de hacer algo x mi…
    el me dice q espere, q es cuestión d tiempo, q la nena crezca y yo siento q se me pasa la vida, llego a decirme q el hace muchas mas cosas q yo, q esta cansado, q deje de quejarme, lo q realmente me dolió, xq parece q toda la labor q yo hago, mas atender la bb no es trabajo, realmente me siento recontra frustrada.

  17. Totalmente en desacuerdo con lo que leo. Acaso elegimos las madres renunciar a nuestra vida personal y laboral por tener hijos? En esta sociedad y en este país no nos queda más remedio, no tenemos otra opción. No es una cuestión de saber gestionarlo, por Dios, es una cuestión de que no se nos tiene en cuenta.
    Mujer, 40 años, 1 hija, despedida a los 5 meses de embarazo de su trabajo en el cuál llevaba casi 8 trabajando, sin ayuda de familiares ni marido. Mi pregunta es: ¿que salida me queda? ¿aprender a gestionarlo? Anda ya! Te aseguro que a pesar de tener el tesoro mas grande de mi vida que es mi hija, nunca elegí esto sino que no tuve otra opción que quedarme fuera y renunciar a mi vida laboral y como yo la mayoría de mamás a mi alrededor, seguimos buscando trabajo, a pesar de cerrarnos puertas continuamente por no poder asumir jornadas completas.

    1. Hola Alisha,

      gracias por tu comentario. Precisamente, lo que trataba de poner de manifiesto en el post, cuando lo escribí, son las dificultades a las que nos enfrentamos como mujeres en esta sociedad, y especialmente las que ejercen su opción de ser madres. Estoy de acuerdo en que el camino puede llegar a ser muy complicado, lo que trato de ofrecer siempre son alternativas: poner el foco de atención en lo que cada una de nosotras podemos hacer, en lo que depende de nosotras. Ser vícitimas de lo que esta sociedad, nuestro jefe o nuestra pareja decida, nos deja en una posición de indefensión, que si queremos, podemos revertir. Gracias por tu reflexión.

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